Contrastes
Salgo convaleciente y desvalido
a mi jardín, y mi jardín me ofrece
sus múltiples fragancias, y parece
como que me dijera: Bienvenido.
Ha vuelto la voluble primavera,
están llenos de rosales los rosales,
y el sol dará sus miles de puñales
en el gran corazón de la pradera.
En cambio a mis campiñas interiores
llego el invierno y con su marcha fría
despetaló mis entreabiertas flores.
A la vez que con manos despiadadas
y traicioneras, la melancolía
clavó en mi pecho un millón de espadas.
Francisco Restrepo Gómez
No comments:
Post a Comment